Señor Grande de Ameca, gracias por regalarme un día más de vida, por permitirme ver este maravilloso amanecer que emociona a mis ojos, gracias por estar siempre a mi lado y por despertarme nuevamente con la cálida brisa de tu amor bendito.
Padre amado, dueño de la eternidad y el tiempo, tuyos son el día y la noche, el pasado y el futuro. Hoy al empezar un día más, detengo mi vida y elevo esta oración, pidiéndote que dejes caer tu manto protector sobre mi alma, cual escudo de amor que me resguarde durante este sábado.
Bendíceme con trabajo para construir prosperidad, ilumina mi mente para saber tomar las decisiones correctas, dame solvencia para no necesitar prestado y líbrame siempre de todo mal.
Amado Dios, te pido que en este nuevo día me ayudes a cerrar mis oídos ante ofensas que sin medir su daño puedan ser lanzadas contra mí, regálame un poco de tu paz y alegría, aleja de mis labios las palabras mentirosas, egoístas, hirientes y mordaces.
Por favor tómame de la mano, bendice mi andar, protege mi vida y la vida de mi familia. Te suplico que nos colmes de alegría, sabiduría, bondad y nos des un corazón noble que sepa la importancia de dar de manera desinteresada.
Padre celestial, te agradezco porque en tu santo nombre avanzo sin temor a las adversidades que se puedan presentar en mi camino. Te agradezco por los cientos de bendiciones con las que me colmas día a día, por los alimentos que con amor me brindas, por el cálido techo que me cobija, por una familia amorosa y por el don de la salud.
Señor, no me queda nada más que dar gracias porque escuchas mis oraciones y siempre me das hermosas respuestas; yo estoy muy agradecido contigo y por eso te serviré fielmente. Gracias por librarme de todo mal Padre amado y por darme tu amor incondicional que me hace tan feliz; gracias por concederme el hermoso regalo de la vida y porque siempre puedo sentir tu presencia cerca de mi senda.
Señor Grande de Ameca, en Ti Confío.
Amén.
Te encomendamos Señor Grande de Ameca, a tus hijos postrados y santificándose con sus dolores, para que si Tú quieres sanarlos así sea, con una sola palabra tuya.
Yolanda Curiel Gómez.
Katy Loza.
Rosario Bañuelos.
Sonia Padilla García.
Jesús Padilla.
Laura Martin del Campo.
Melody Luna.
Ana Ubiarco.
Laura Vera.
Cástulo Guerrero Vidrio.
Laura Virgen.
Lulú Guardado.
Raúl Quintero.
Roció Esmeralda Pérez Mariscal.
Raúl Rentería Barajas.
Fam. Vera López.
Fam. Fregoso López.
Fam. López Ramos.
Ma. Graciela Zepeda Cisneros.
Pablo Rodríguez Zepeda.
Oscar Rodríguez Zepeda
Beatriz Adriana Núñez Cruz.
Anna Velasco.
Fam. Meza Salas.
Roberto Peña.
Ramona Gallardo Rivera.
Lorenzo Navarro.
Ma. De Lourdes Quintero Gutiérrez.
Alma Armejo González y Familia.
Jasón Ali Castillo Santos.
Irma Lozano Montes de Oca y Familia.
Aureliano Ahumada Castellano.
Miguel Zarate Zarate.
Soledad Aranda Barajas.
Miguel Ángel Quintero Romo.
Familia Rosas García.
Aurelia Figueroa Figueroa.
Tomasa Romo Vda. de Quintero.
Erika Sayavedra y Familia.
Fam. Díaz Naranjo.
Roberto Molina Salazar.
Elena Tenecela y Familia.
José Luis Tapia Virgen.
Javier Guerrero y Familia,
Familia Cervantes Molina.
Edison Lasso R. y Familia.
Laura D Naranjo y Familia.
Armando García Vieyra y Familia.
Puente García y Familia.
Por todos los hijos ausentes de Ameca.
Señor Grande de misericordia y amor,
ponemos en tus manos amorosas
a nuestros hermanos y hermanas
que has llamado de esta vida a tu presencia.
En esta vida les demostraste tu gran amor,
y ahora que ya están libres de toda preocupación
concédeles pasar con seguridad las puertas de la muerte
y gozar de la luz y la paz eterna.
Habiendo terminado su vida terrena recíbelos en el paraíso,
en donde ya no habrá tristeza ni dolor,
sino únicamente felicidad y alegría con Jesús, tu Hijo,
y con el Espíritu Santo, para siempre.
Amén.
Hermanos, si les queda aliento pido un padre nuestro por nosotros, sus hermanos en Cristo:
Imelda Martínez Rivera y Trigio López Solano.
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